En un acto sin precedentes, miles de voces se unieron en una sola causa: proteger lo que aún nos queda de arte, memoria y naturaleza. Este viernes, la sociedad civil organizada en Nayarit presentó un amparo legal para frenar la construcción de un nuevo estadio en los terrenos donde hoy se levanta Ciudad de las Artes.
Lo que comenzó como una indignación compartida se transformó en acción colectiva. Casi 8 mil firmas fueron reunidas por ambientalistas, artistas, gestores culturales y ciudadanos de todas las edades, que se negaron a quedarse de brazos cruzados ante la posible desaparición de un espacio que representa mucho más que infraestructura.
“El arte también es patrimonio. Y los árboles también tienen voz. Nosotros solo la prestamos”, expresó una de las firmantes al momento de entregar la documentación, de la mano del despacho de abogados Art. 27, encargado de formalizar el recurso legal ante las autoridades correspondientes.
Este gesto representa más que un trámite judicial. Es el grito silencioso de una comunidad que quiere ser escuchada. Que entiende que el progreso no puede medirse a costa de arrasar con lo que da identidad, sombra y alma a una ciudad.
Ciudad de las Artes no es solo concreto. Es historia viva. Es el eco de conciertos, talleres, debates, exposiciones, resistencias… y árboles. Muchos de ellos con décadas de vida, amenazados hoy por maquinaria e intereses deportivos mal planeados.
Queda ahora en manos de la justicia escuchar este clamor ciudadano. Pero lo cierto es que, pase lo que pase, Nayarit ya hizo historia. Porque cuando el pueblo se organiza, la esperanza se firma.
